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CRISOPINA

La educación y la ciudadanía

La educación y la ciudadanía

Ahora que viene la 'vuelta al cole', es más que sabido que las escuelas públicas deberán aplicar la Ley Orgánica de Educación. Esta norma indica en uno de sus preceptos que se debe impartir una nueva asignatura denominada 'Educación de la ciudadanía'. Ya hubo años atrás una polémica menor con la implantación de la asignatura de 'ética', y ahora otra vez se ha puesto el grito en el cielo. Me parece una buena iniciativa eso de enseñar al alumnado desde una perspectiva aconfesional, sobre todo porque las creencias son individuales, y por consiguiente, no debería hacerse hincapié en ninguna de ellas. Es cierto que España es tradicionalmente católica y no podemos quitar de un porrazo la religión (de hecho todavía debería dársele a los padres la opción de escoger). Sin embargo, es mejor mostrar la existencia de diversas religiones y explicar en qué dogmas se basan a sólo tratar una de ellas detenidamente porque así los niños interiorizarán la tolerancia y el respeto. Es una manera de evitar la discriminación al que piensa diferente. Muchas veces se dice que en la educación está la clave para civilizar a las personas. La 'Educación de la ciudadanía' podría ser una de esas claves, y no sólo en el ámbito de creencias, sino también en el de la vida cotidiana ya que me figuro que esta materia no es un 'enemigo' de la religión cristiana. Supongo que tendrá como objetivos primordiales enseñar  a comportarse con el prójimo e inculcar valores positivos tales como la solidaridad. ¿Y al fin y al cabo esto último que he escrito no es uno de los cometidos de la Iglesia? Habrá que dar una oportunidad a la asignatura ¿no? Ahora bien, dicho todo esto me surge una duda: Si según la Constitución estamos en un Estado laico, deberíamos eliminar del calendario las festividades relacionadas con el cristianismo. Vamos, suprimir las Navidades, Semana Santa, María Inmaculada... Y esto, seguro que por la Virgen Santa, no nos haría ninguna gracia.

3 comentarios

Regi -

En realidad sí que es un pequeño matiz, pero nada inocente. Como no me explico demasiado bien, he buscado una explicación en la red de redes de un señor llamado Emilio Sanz, a ver qué te parece:

" 'Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones'. Esto es lo que dice el artículo 16, párrafo 3º, de la Constitución Española.

Como puede leerse, no dice que España sea un estado laico, ni laicista. Un estado laicista es un Estado que ignora deliberadamente las creencias religiosas de sus ciudadanos, y cuyo único mandato a sus gobernantes respecto de la religión es precisamente no tener en cuenta las creencias religiosas de nadie y actuar independientemente de ellas".

cris -

Pensé que eran sinónimos, aunque se puede decir que el matiz es muy pequeñito. Según la Real Academia española:
-aconfesional:
Que no pertenece o está adscrito a ninguna confesión religiosa.
-Laico:Independiente de cualquier organización o confesión religiosa.

Vamos que el Estado sea aconfesional significa que no está adscrito a ninguna confesión pero puede apoyar a alguna. ¿Ese es el matiz no? Bueno pues lectores disculpen mi error.

Regi -

España no es un Estado laico, sino aconfesional, un matiz muy importante y que explica todavía el tirón que tiene aún la Iglesia católica y su relación con el poder. Si la asignatura sale a flote, quizás algo menos de influyencia... Esperemos.
¡Un saludo!